El autismo envuelve diversos sintomas

La mirada perdida y los movimientos repetitivos no son las únicas
características del autismo, un síndrome que cada vez resulta más
complejo porque al ser producto de diversos trastornos neurológicos,
combinados con alguna carga genética, sus manifestaciones varían de
una persona a otra.
"Los profesionales especializados en autismo (...) han introducido la
terminología 'trastorno del Espectro Autista' para reflejar el
espectro amplio de características que hoy en día definen autismo",
refiere el artículo Identificación y Evaluación de Niños con
Trastornos del Espectro Autista (TEA), publicado por la Clínica
Mexicana de Autismo, A.C. (Clima). No existe una prueba de laboratorio
con la que se pueda identificar que se padece alguno de los trastornos
de este espectro, por lo que el diagnóstico se hace a partir de una
historia clínica del niño y la observación de cómo se desenvuelve,
indica Carlos Marcin Salazar, presidente y director nacional de Clima.
"Existen entre 15 y 20 conductas autistas, esto no quiere decir que
todas se tengan que presentar en un solo pequeño, sino que unas pueden
o no presentarse; pero hay tres que siempre están: problemas de
lenguaje, cognitivos y de socialización", señala Jorge Raúl Ojeda
Santana, padre de un niño con autismo.
Diagnóstico temprano
"En México, el mayor obstáculo para abordar de manera adecuada el
autismo es la falta de información y de centros de atención", comenta
Rogelio Garza, presidente del comité organizador del Congreso Mundial
de Autismo, celebrado en noviembre pasado en Monterrey.
El grupo Clima lleva 20 años trabajando con familias que tienen un
miembro con autismo; además, capacita a profesionales que están en
contacto con niños y tiene clínicas afiliadas en 20 estados.
Sin embargo, esta cobertura es insuficiente, pues aunque no hay cifras
nacionales oficiales, se calcula que un niño de cada 110 nacimientos
tiene autismo.
Se sabe que el diagnóstico de alguno de los TEA se puede confirmar
hasta los 3 años de edad, aunque desde los seis meses de nacidos
pueden presentarse una serie de "señales de alarma" que los adultos
pueden identificar.
Un mal definido
En 1988, Lorna Wing definió el autismo como un trastorno que abarca 3
grupos de deficiencias: en la interacción social, donde se incluye a
niños y adultos aislados, pasivos o hiperformales pedantes; en la
comunicación, donde hay dificultades en el habla, en su comprensión,
en la entonación y control de la voz y en la comprensión de la
comunicación no verbal; y en el uso de la imaginación, pues no imitan
juegos ni pueden imaginar alguno y manejan los juguetes sólo por la
sensación física. Se suman los comportamientos repetitivos simples,
como encender y apagar luces; y los repetitivos elaborados, es decir,
el crear rutinas.
¡ATIENDA LAS SEÑALES!
Si observa en su bebé estas conductas, coméntelo con el pediatra para
descartar la posible presencia de algún trastorno del espectro
autista*:
0-3 meses
>El bebé no mira a la cara.
>No sonríe cuando se le habla.
>La voz de la madre no le tranquiliza.
3-6 meses
>No toma los objetos.
>No anticipa los brazos para que lo carguen.
>Sus piernas siempre están estiradas y tensas.
6-9 meses
>No se sienta.
>No llama con la voz.
>Llora mucho o no llora nunca.
9-12 meses
>No se pone de pie.
>No señala con el dedo.
>No balbucea usando consonantes
(d, p, m, g)
12-18 meses
>No camina
>No señala partes del cuerpo cuando se le nombran
>No se interesa por otros niños

Jaume Guinot
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