La competencia implica un deseo de excelencia, un logro. La competencia cumple una función fundamental en la historia de la evolución del ser humano ya que permite medir el potencial, las limitaciones y la capacidad de superación de las personas. Es un trascender por un sendero que nos conduce al éxito. Visto desde el camino de la superación, no se trata tanto de ganar o perder, ya que el éxito depende de la capacidad de enfrentar y vencer nuestros propios temores y debilidades. Es aceptar un reto en la búsqueda de un objetivo, y éste no se puede lograr según la velocidad de tus deseos. Muchas veces es el rival el que puede dictaminar el ritmo de ese logro. Esto significa que en cualquier evento deportivo, siempre habrá un ganador y un perdedor, o al menos un empate de dos equipos igualmente frustrados con penas y sin glorias. Ante los desafíos hay que aprender a centrarse, a concentrarse en el objetivo. Como venimos diciendo los errores siempre están presentes y no deben ser motivos de desconcentracion. Muchas veces la falta de atención se produce por los cambios emocionales según los resultados reales o previsibles por los que se está pasando. No se puede salir a jugar basado en expectativas de logro pues al no lograrlo, la frustración es más grande.
Cuando un equipo piensa que el rival es fácil, es un pensamiento peligroso ya que se establece de antemano un sentimiento de logro. La atención sostenida decae, luego ante un resultado parejo surge la ansiedad por temor a perder lo que conduce que el equipo se desconcentre. Más tarde, al no encontrar la victoria rápido, se enojan, se vuelven torpes y el miedo entra a la cancha. El que esperaba dominar pasa fácilmente a ser dominado. Esto es un golpe duro y si no se trabaja a tiempo pasa a ser un problema de larga duración. De ser un equipo acostumbrado a permanecer entre las primeras posiciones cae a las últimas más allá de todaestadística.
Existen varios métodos que se pueden implementar para incrementar la conciencia del rendimiento óptimo como por ejemplo los cuestionarios y las conversaciones en grupo. La comunicación grupal ayuda a iniciar un proceso de auto-consciencia y reflexión. ¿Cómo se han sentido? ¿Qué les ha molestado? ¿Cómo hubieran jugado? ¿Qué habrían cambiado? La discusión general ayuda a los jugadores a aprender sistemáticamente de sus experiencias vividas, analizándolas y trabajando en el cambio para que puedancomenzar a enfocarse en el siguiente partido. Los jugadores pueden describir sus rendimientos de manera individual y compartir respuestas con el grupo si lo desean. Estas son algunas preguntas individuales que sirven para evaluar el rendimiento del jugador: » ¿Me concentro con facilidad en cada jugada olvidándome de la anterior? Estas son algunas de las preguntas que de ser positivas se tendría que mejorar. Sus respuestas permiten alcanzar una relación entre el estado psicológico y el rendimiento. Algunas preguntas para ser tenidas en cuenta: En el entrenamiento mental se debe trabajar todas las situaciones y emocionesque un jugador pueda sentir. Este plan debe cubrir todas las experiencias posibles y su intención es trabajar sobre una estrategia donde "la peor sorpresa no es sorpresa ya que se ha entrenado mentalmente y se puede manejar". El jugador que construye su rendimiento no afirma "esto es imposible", sino que se pregunta "¿Qué debemos hacer para que esto sea posible?" y encontrar las respuestas para poner en práctica. Para ello se debe trabajar reforzando las debilidades. Cada jugador es distinto y así serán las habilidades a cambiar. Lic. Julia Alvarez Iguña |
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