Antes empecemos entendiendo que el divorcio es la separación de los conyuges. Existen muchos factores que influyen para que se desenboque en él. Hay muchos factores que hay que analizar antes de decidirse por divorciarse; por un lado están las razones personales, los sentimientos con respecto al otro conyuge, los hijos y el hecho de cómo se va a afrontar la relación a futuro con ellos y el mismo hecho de comunicar a los hijos que sus padres se van a separar. Hay muchos factores que entran en juego antes de decidir si uno debe quedarse o irse y qué es lo que se va a hacer una vez divorciado
A continuación traduzco parte de un artículo sobre el divorcio de Susan Pease titulado "Contemplando el divorcio ".
No esperes que la cocrianza de los hijos sea fácil después del divorcio, hay que prepararse para que luego del divorcio los hijos tengan una educación adecuada y el apoyo necesario. La gente está constantemente sorprendida y decepcionada cuando su ex-cónyuge no está a la altura como co-padre después de divorcio, incluso parece no era tan notoria la falta de responsabilidad durante el matrimonio.
No esperes que la cocrianza de los hijos sea fácil después del divorcio, hay que prepararse para que luego del divorcio los hijos tengan una educación adecuada y el apoyo necesario. La gente está constantemente sorprendida y decepcionada cuando su ex-cónyuge no está a la altura como co-padre después de divorcio, incluso parece no era tan notoria la falta de responsabilidad durante el matrimonio.
Aquí va una historia.Ann, la esposa de Mark, era una madre distante de sus tres hijos cuando vivían juntos, en la que nunca asistió a la escuela o a los eventos deportivos de ninguno de ellos. Ella no era muy cariñosa y no ayudaba a ninguno de sus hijos en sus actividades diarias tales como los deberes, bañarse y dormir. Mark se hizo cargo de todas las necesidades de sus niños en este sentido.
Cuando se separaron, Ann era menos involucrada con los niños de lo que había sido nunca. Apenas los veía y no era dura con ellos, esto producía sufrimiento a Mark. Tenía la carga de cuidar de ellos el 99% del tiempo, y se sintió muy triste cuando sus hijos no recibían la "adecuada maternidad" (como él la llamaba) que merecían.
Aquí va otra. Jodi da a su esposo varias oportunidades de intensificar la relación familiar mientras estuvieron juntos, pero él no era capaz de compartir con su hija . A pesar de eso Len se ofrece para cuidar de su hija, es entonces cuando se nota que no se ajusta. Se supone que, si se separan, él quiere tener "tiempo de calidad" con su hija, ya que no llegará a verla todos los días.
En ambos casos, lo que se espera es que los padres con menor participación en la crianza de los hijos sean inteligentes y responsables con la tutela de los menores, puesto que hay una obligatoriedad de parte de la ley que otorga cierta custodia y responsabilidad sobre los hijos. En ambos casos, los padres con menor participación son incapaces de cumplir su parte (aún cuando su participación era menor de la que el otro tenía). Y en ambos casos, hubo un elemento de sorpresa (un montón de historias y razones personales con las que se justificaban de su falta de compromiso) y decepción. En ambos casos se necesitaba la intervención post-divorcio.
Lo que se descubre a través de la orientación a los padres fue que, en el primer escenario, Ann es finalmente honesta con Mark y le dice que no está interesada en ser madre: que está más enfocada en su carrera y no quiere participar en "todas las actividades masculinas".
La historia de Len fue de baja autoestima: No fue porque no quería ver a su hija (pues se siguió ofreciendo para cuidar de ella), sentía que no tenía nada que ofrecerle por lo que en última instancia, decide no hacer nada con ella.
Aunque siempre hay excepciones a esta regla, en general, es chocante la reacción que tienen muchos padres cunado pasan por el divorcio, ya que se hace más visible los problemas individuales con relación a la crianza de los hijos, aunque no eran tan visibles durante el matrionio, ahora con el divorcio está presente en la misma medida o peor.
Si estas contemplando la disolución del matrimonio, y piensas que la paternidad de intercambio será más fácil "en el otro lado", piensalo otra vez. No estoy sugiriendo que toda persona debe permanecer en un matrimonio que no está funcionando, pero creo que es importante hacer la elección correcta para el divorcio, con los ojos abiertos y con sistemas de apoyo (ayuda de cuidado de niños, terapeutas, amigos de sus hijos, amigos los padres) en su lugar.
Cuando se separaron, Ann era menos involucrada con los niños de lo que había sido nunca. Apenas los veía y no era dura con ellos, esto producía sufrimiento a Mark. Tenía la carga de cuidar de ellos el 99% del tiempo, y se sintió muy triste cuando sus hijos no recibían la "adecuada maternidad" (como él la llamaba) que merecían.
Aquí va otra. Jodi da a su esposo varias oportunidades de intensificar la relación familiar mientras estuvieron juntos, pero él no era capaz de compartir con su hija . A pesar de eso Len se ofrece para cuidar de su hija, es entonces cuando se nota que no se ajusta. Se supone que, si se separan, él quiere tener "tiempo de calidad" con su hija, ya que no llegará a verla todos los días.
En ambos casos, lo que se espera es que los padres con menor participación en la crianza de los hijos sean inteligentes y responsables con la tutela de los menores, puesto que hay una obligatoriedad de parte de la ley que otorga cierta custodia y responsabilidad sobre los hijos. En ambos casos, los padres con menor participación son incapaces de cumplir su parte (aún cuando su participación era menor de la que el otro tenía). Y en ambos casos, hubo un elemento de sorpresa (un montón de historias y razones personales con las que se justificaban de su falta de compromiso) y decepción. En ambos casos se necesitaba la intervención post-divorcio.
Lo que se descubre a través de la orientación a los padres fue que, en el primer escenario, Ann es finalmente honesta con Mark y le dice que no está interesada en ser madre: que está más enfocada en su carrera y no quiere participar en "todas las actividades masculinas".
La historia de Len fue de baja autoestima: No fue porque no quería ver a su hija (pues se siguió ofreciendo para cuidar de ella), sentía que no tenía nada que ofrecerle por lo que en última instancia, decide no hacer nada con ella.
Aunque siempre hay excepciones a esta regla, en general, es chocante la reacción que tienen muchos padres cunado pasan por el divorcio, ya que se hace más visible los problemas individuales con relación a la crianza de los hijos, aunque no eran tan visibles durante el matrionio, ahora con el divorcio está presente en la misma medida o peor.
Si estas contemplando la disolución del matrimonio, y piensas que la paternidad de intercambio será más fácil "en el otro lado", piensalo otra vez. No estoy sugiriendo que toda persona debe permanecer en un matrimonio que no está funcionando, pero creo que es importante hacer la elección correcta para el divorcio, con los ojos abiertos y con sistemas de apoyo (ayuda de cuidado de niños, terapeutas, amigos de sus hijos, amigos los padres) en su lugar.
Hay que estar bien decidido y tener una estrategia bien clara de cómo se va a afrontar el futuro y cuál será el papel que tendremos como padres en la vida de nuestros hijos.
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